Me doy el gustazo de estar conforme con una de las medidas que ha anunciado Zapatero, y veremos si cumple. No digo que esté de acuerdo con las medidas, porque creo que eso sería absurdo, ya que deberían haber sido más, más hondas y mucho antes, pero tampoco estoy en absoluto desacuerdo con ninguna de ellas. Mi preferida es la que elimina la obligatoriedad de las cuotas empresariales a las Cámaras de Comercio. ¡Ya era hora! ¿Significará esto que se abre la veda para poder acabar con impuestos inútiles, con abusos seculares y con mamandurrias varias? No estoy demasiado convencido de la utilidad de las Cámaras, pero estoy seguro de que si son útiles pervivirán y se harán más eficaces, tirarán menos el dinero y despedirán a muchos enchufados e inútiles de buenas familias.
¡Zapatero ha acertado! No se puede perder la esperanza, ni siquiera si se es español y liberal.