Reproduzco, con permiso del autor, un estupendo análisis de Señor Lobo en bandalismo.net, RIP por Vale Music, del que creo que se pueden sacar provechosas lecciones en relación con el confuso y escasamente desinteresado debate, por llamarlo de algún modo, sobre los derechos de autor, la piratería y la malhadada ley Sinde .
La discográfica Vale Music cesará en su actividad en las próximas semanas. Para algunos será una mala noticia, para otros, entre los que nos contamos, simplemente algo inevitable, dictado por el panorama actual de cosas, que premia modelos de negocio innovadores y castiga a los anclados en el pleistoceno. Muchos ya decíamos hace un año que el respaldo de las discográficas a productos prefabricados y de nula originalidad, como venían siendo los triunfitos, estaba próximo a su fin. Pero la realidad nos ha sorprendido; las cosas están pasando incluso más rápido de lo que se preveía. Comparemos esta navidad con las anteriores. Nadie ha prestado atención a ese infausto programa de la 1, «El Disco del Año», y hasta José Mota ha decidido parodiar en su especial fin de año a los Conciertos de Radio 3 y el Primavera Sound. Algo que es mencionado en el especial de fin de año, ya no es tan minoritario.Lo minoritario ahora parecen ser las ventas de Vale Music. Qué ironía, en un sello que había apostado por la comercialidad más descarada, por el politono y el éxito rápido, de cadena industrial. Tan mal estaba la cosa, que no se han esperado a conocer los datos de ventas del periodo navideño, tradicional temporada fuerte de estos sellos, para echar el cierre.Que conste que no nos alegramos por las personas que se quedarán en el paro ante el cese de actividad de esta empresa, cien trabajadores según el «portavoz» David Bisbal, que lo ha anunciado vía Twitter, muy moderno, el tío. Pero por favor, no echemos la culpa al empedrado (la piratería).“No os engañeis, que la historia de Vale Music termine aquí es por la piratería descontrolada que tenemos en internet”. Probablemente una de las mayores incoherencias que han salido de los labios del ínclito Bisbal. ¿Pero quién le ha dicho a usted que en internet la gente piratea de forma descontrolada el catálogo de Vale Music? Si alguien se ha bajado alguna vez un disco entero de Oceana o Salmah, por favor que nos lo haga saber de forma anónima en los comentarios.
Y si no sabéis quienes son Oceana o Salmah, os cuento que la gran esperanza blanca de Vale Music para levantar el vuelo ante los estertores finales eran… Los Cantores de Híspalis. Muy actuales y muy demandados en toda «página de enlaces» que se precie. Toma nota, Sinde.La realidad es esta. La televisión ya no es aquel rodillo imparable, que creaba éxitos musicales como churros. Antes, la televisión dictaba, y el comprador potencial obedecía. Ahora, el centro de gravedad se ha desplazado hacia internet, donde la gente busca, encuentra, conoce y recomienda música de formas muy diversas, y todas más divertidas e inteligentes que las que ofrecía la tele.La oferta musical que el usuario encuentra en internet es casi ilimitada. Por ello, fabricar un nuevo éxito de la nada, lleva tiempo, mucho tiempo, saber hacer y dedicación, incluso si la música es buena, no digamos si se trata de un plomazo. No basta con meter dinero y compraar espacios publicitarios. Eso se ha acabado, amigos. Mala noticia para los ejecutivos y publicistas de la vieja escuela. La gente ha descubierto que hay demasiada música buena como para perder tiempo escuchando la no tan buena.Y un corolario a todo esto: ahora conocer nueva música no implica perder los 20 euros de un CD que se olvidaba a los tres días porque sólo traía una canción buena. Por tanto, los aficionados a la música tienen más dinero disponible para gastar en productos que realmente merecen la pena: ediciones especiales de sus discos favoritos y, sobre todo, conciertos. Algo me dice que Oceana y Salmah no han llenado muchos conciertos últimamente, y tengo claro que los festivales no se las han rifado para tenerlas en su cartel este verano. Así pues, ¿quién está equivocado? ¿Millones de internautas, o los señores responsables de la gestión de Vale Music? ¿Tanto les costaba modernizar el modelo de negocio, con la pasta que han podido ganar en los últimos años? ¿O es que interesa que haya una víctima, para poder presionar y que el congreso apruebe de una vez la Ley Sinde? Que hagan lo que quieran los partidarios del antiguo modelo, pero la batalla de internet la tienen perdida.