Una canción que da que pensar

Gracias a esa cadena de amigos que manda cosas, unas interesantes, otras jocosas, he podido escuchar a un grupo canadiense que pone música a unas ideas que no se quieren oír, una letra que debiera hacer pensar a los más jóvenes, y a nosotros, a los que les hemos traído hasta aquí.
Afrontar directamente la evidencia de que podemos estar en una degeneración irreversible, tanto desde el punto de vista demográfico, que es el más obvio, como desde el punto de vista moral, que es seguramente el básico, no es agradable, pero pudiera llegar, y no muy tarde, el momento en el que no hablar de estos problemas fuere una deslealtad, una traición para quienes nos van a heredar.
Hay una letra brillante de John Lennon que dice algo así como que la vida es lo que pasa mientras estás haciendo otra cosa (Life is what happens to you when you’re busy making other plans, Beautiful Boy), y creo que puede decirse que la historia también pasa de ese modo. Nuestra generación se ha preocupado tanto del futuro, de su futuro, que se ha olvidado de advertir los fenómenos decisivos que seguían un ritmo aparentemente lento, pero inexorable. Ahora el mañana es oscuro, pasaron los tiempos de las vacas gordas y no está mal que, en medio del jolgorio de una noche, unos chicos canadienses digan algunas verdades tan dolorosas como inquietantes.