El gobierno de ZP tiene, entre otras, la ventaja de los grandes equipos de fútbol, que, cuando parece que están en crisis, se ven salvados por alguna de sus grandes figuras individuales. Es lo que ha pasado con la ministra de Defensa que, sin duda, es un gran fichaje, y ha sido una de las grandes promesas del pasado. Pues eso, que andaba el gobierno azacaneado con los pactos y sin divisar un puerto de abrigo en la tormenta, cuando la ministra ha aparecido ante la prensa para comunicar que iba a desplegar un buque en alguno de eso mares procelosos, para que no se diga.
Una ministra capaz de desplegar un buque es, valga la paradoja, un regalo de los cielos. Como Nietzsche dijo que no podremos librarnos de Dios mientras sigamos creyendo en la gramática, es posible que la señora Chacón esté desplegando (ahora sí) un vasto programa de ateización liberadora y haya empezado con algunos verbos. O tal vez sea pura ignorancia, esa ignorancia que hace que los políticos se crean omnipotentes, y se consideren tan capaces de desplegar un buque como de favorecer alianzas entre civilizaciones. En ambos casos, miles gloriosus.
1. tr. Desdoblar, extender lo que está plegado. U. t. c. prnl.
2. tr. Aclarar y hacer patente lo que estaba oscuro o poco inteligible.
3. tr. Ejercitar, poner en práctica una actividad o manifestar una cualidad. Desplegó tino e imparcialidad.
4. tr. Mil. Hacer pasar las tropas o los buques del orden cerrado al abierto y extendido. U. t. c. prnl.