Curiosa manera de entender la patria

Creo que las reacciones en torno al accidente de Santiago han sido más o menos mesuradas, correctas, pero me preocupa que algunos traten de considerar como escasamente patriótico la exigencia de mayores precisiones en torno a las causas del accidente, sin cargar toda la responsabildad del caso en el despiste que el maquinista ha confesado. Hay que ser valientes para preguntarse cosas que algunos puede que no quieran que se sepa, esas son las que tienen mayor interés, y hay que hacerlo siempre con mesura, sabiendo que la seguridad perfecta es imposible y que un fallo humano puede ser siempre fatal, pero debe quedar claro el contexto en el que ha sucedido todo y las razones que lo han hecho posible, y, luego,  inevitable. Se lo debemos a las víctimas y a  nuestra patria. 
De nuevo sobre la lectura