La línea de la Justicia

Según El Mundo, una modelo holandesa ha ganado un juicio contra un despido porque su cintura superaba los 94 centímetros, o cosa así. Siempre he pensado que la justicia laboral es algo así como la música militar, un equívoco, pero se ve que existe incluso en sitios tan civilizados como Holanda. De cualquier manera, y sea lo que sea del caso, algo marcha mal en el mundo si no se puede dejar de contratar a una modelo por razones estéticas, o si no se puede despedir a un matemático cuando no sepa  multiplicar, pero no prueben, por si acaso. La creencia de que los derechos están por encima de todo, sobre todo de la lógica, está introduciendo un factor de absurdo en la vida contemporánea; el hecho de que los abogados siempre se las arreglen para sacar agua del pozo más seco es un magro consuelo ante tanta tontería. Y los jueces no harían mal en echarle a este tipo de cuestiones algo de sentido común, aunque eso les asegure no salir en los periódicos. 
Una administración moderna