Es muy desagradable ir por el mundo dando lecciones, pero hay veces en que no te dejan otro remedio. En particular me llama mucho la atención las tonterías que salen de la boca de quienes dicen entender de política o, lo que es casi peor, querer dedicarse a eso. Supongo que más de uno pensará lo mismo de lo que yo digo, tal es el problema. De cualquier manera, ignorar que la política se desarrolla conforme a reglas que no siempre son las que a uno le parecen, le convienen, o le resultan más justas, es apostar por el desengaño, que es la única manera de aprender, sólo un poco, no se crean. ¡Entusiastas del mundo! ¡Moderaos! No tenéis otra cosa que perder que un ridículo batacazo.