Pena, asco y vergüenza

Ver cómo  algunos personajes del PP defienden o creen que deben defender a gente indefendible me produce pena, asco y vergüenza. Me dan pena los que lo hacen creyendo hacer bien, porque son tontos; me dan asco los que lo hacen porque les conviene, porque son iguales que los que defienden, y me dan vergüenza todos porque no se dan cuenta de que están crucificando a su partido y a su país, claro que lo último no debe importarles mucho a bastantes de ellos. 
Samsung también está en ello